¿Tienes hijos pequeños? Llévalos seguros en el auto
La obligación de que los niños viajen en automóvil usando un sistema de sujeción diseñado específicamente para ellos ya está plasmada en prácticamente cualquier reglamento de tránsito del país, pero las reglas no son iguales en todos los lugares y tampoco están a la altura de las últimas investigaciones en materia de seguridad.
Mientras que en la Ciudad de México y Guadalajara, los menores de 12 años o 1.45 metros de altura deben viajar en el asiento trasero usando algún sistema de sujeción de tres puntos, en el área metropolitana de Monterrey la obligatoriedad termina a los 7 años.
También hay diferencias en las regulaciones sobre qué infantes deben viajar en un asiento mirando hacia atrás, pues en la Ciudad de México y Monterrey se exige que lo hagan quienes pesan menos de 9 kilos, mientras que en Guadalajara es para los menores que pesan menos de 13 kilos.
En comparación, en Estados Unidos la recomendación para llevar asientos mirando hacia atrás cambió en 2011, cuando la Academia Estadounidense de Pediatría actualizó sus lineamientos: en lugar de recomendar que los niños de menos de un año o 9 kilos viajaran mirando hacia atrás, elevó las cifras a dos años o hasta que alcancen el máximo permitido por el fabricante de su asiento de auto.
“Los asientos que se instalan mirando hacia atrás hacen un mejor trabajo a la hora de soportar la cabeza, cuello y columna de los infantes en un choque, porque distribuyen la fuerza del impacto a lo largo de todo el cuerpo”, explicó Dennis Durbin, el médico investigador encargado de la actualización.
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Según un estudio citado en esa ocasión, los menores de dos años tienen 75 por ciento menos probabilidad de morir o resultar heridos seriamente si van en un asiento mirando hacia atrás.
Ese cambio realizado hace ya 6 años fue considerado tardío en países como Suecia, donde los niños viajan mirando hacia atrás hasta los 4 años o 25 kilos, el límite más alto del mundo.
En México, actualmente es posible encontrar asientos que exceden los requerimientos locales, aunque también está la posibilidad de adquirirlos vía internet, tras verificar que cumplan con los estándares de una certificación reconocida, como la que otorga la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA, por sus siglas en inglés).
En el caso de niños de más de 4 años, los reglamentos viales exigen el uso de “boosters”, asientos elevadores que se fijan al asiento del auto para que el cinturón de seguridad instalado de fábrica en los vehículos se ajuste al menor y proporcione protección adecuada en caso de un choque.
Según un estudio realizado por pediatras en Estados Unidos, el uso de los asientos elevadores junto con el cinturón de seguridad del automóvil reduce en 45 por ciento el riesgo de que los niños de 4 a 8 años sufran heridas severas en un choque, comparado con el uso del cinturón de seguridad solamente.
Además del aumento en la seguridad de tus niños, recuerda que las sanciones por viajar sin un sistema de sujeción adecuado a su peso y edad van de 377.45 a 754.90 pesos en la Ciudad de México, mil 132.35 a mil 509.80 pesos en Monterrey y hasta 2 mil 103 pesos en Jalisco.
Fuente: El Financiero
